La vida es un mar de ilusiones…
con sus altibajos… con sus realidades y también fantasías… no intentar vivir
con ello es errado… tenemos que estar conscientes de que cada hora que pasa es
un triunfo… debemos luchar por el cada día… no dejar que los malos momentos nos
absorban y nos hagan sentirnos estresados… ¡lucha!... ¡vive!... tienes ese
corazón fuerte capaz de soportar tristezas, dolores y derrotas, pero no por
ello vas a bajar la cabeza ante el infortunio… recuerda al ave fénix que resurgió
de entre las cenizas abrió sus alas y
voló… y tú tienes esas alas en tu imaginación… tú tienes la constancia y la fe
inmensa de saber que puedes volar hacia tus ideales y sueños… que no te
derroten los malos días o malos momentos… despierta y pon el pie derecho en el
piso… sé cautelosa del futuro… sé inmensamente fuerte y sonríe… que la risa
purifica el alma y eso te hace sentir lo maravillosa que eres… no te dejes
vencer por nada ni por nadie… y cuando sientas que vas a caer… solo cierra los
ojos y recuerda que eres como esa ave que planea suave y se deja llevar por la
suavidad del viento… solo cierra los ojos y piensa en la inmensidad del mar y
tú ahí casi a ras de las aguas vas volando con esas alas níveas y bellas… como
la gaviota sobre el mar… con la brisa acariciando tu faz… con las gotas
salpicando tu piel… con los ojos cerrados… sin pensar en nada más que en la
dulce placidez de un momento de paz… de autocontrol… dejando que llegue a ti
esa seguridad de ser única y plena… dejando que tu autoestima se eleve hasta
las nubes hasta encontrarte a ti misma como el ser maravilloso y hermoso que
eres… y después… después ya puedes levantarte
y caminar segura y firme… después ya puedes salir al mundo como lo que eres… una gran mujer…
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